Pañuelos descartables

Bien
son las seis y cincuenta y tres minutos de la mañana
decidí bajar al baño a despabilarme
me lavo la cara
y como no tengo toalla de mano 
tengo el paquete de pañuelos que le compraste
a un vendedor la ultima vez que nos vimos,
me seque la cara y subí.

Admito que
ese paquete de pañuelos
me salvaron porque
después de aquel encuentro
pesque un resfriado fastidioso
y recordé que tenia ese paquete
y un poco te extrañe
y sonreí
y hasta ahora conservo
un absurdo paquete de pañuelos
lo único tangible que tengo de vos
las noche y los besos
huyen 
de nosotros
y quedan
en el lugar que cada uno
por su parte
quiere brindarle al recuerdo
...
y son las siete con cuatro minutos
terminal de San Roque,
¿cuanto falta para llegar?
¿cuanto falta para volver a verte?
¿por que siempre empiezo y termino en vos?
desde que el Sol quema mi cara
hasta que la Noche se acomoda en mis sueños,
que mi Diablo y mi corazón me perdonen
por ser tan ingenua
¿Pero que esperas?
Baje la guardia
la flecha atravesó al bobo y acá me tenes
entre papelitos arrugados que guardo en la mochila
escribiendo poemas sin parar
y cuando ya no quede mas papel
puede que use
algún pañuelo
de ese paquete
descartable.